Llegamos a Merikarvia, un pequeño pueblo marinero de la costa suroccidental de Finlandia, puerta de entrada al Parque Nacional del Mar de Botnia. Un destino ideal para unas vacaciones de verano frente al mar. Unos días navegando por el Archipiélago de Oura – un paisaje de islas e islotes de belleza agreste -; explorarando la isla de Ouraluoto, antigua estación piloto; y haciendo paddle surf en las aguas tranquilas del Báltico.
Nos adentraremos también en la campiña para pasar la tarde aprendiendo a pescar en la bella área fluvial del río de Merikarvia. Y visitaremos la Granja Koivuniemen Herra, un auténtico parque temático donde nos pondremos en el papel de un ganadero. Un espacio para la cultura y la gastronomía, descubriendo un antiguo ahumadero de pescado reconvertido en galería de arte. Y degustando algunas especialidades de la cocina local – pescado ahumado y pan negro del archipiélago – en una cabaña junto al mar.
Unos días en Merikarvia que se pueden combinar con la visita a otras localidades de la costa suroccidental de Finlandia. Como la ciudad de Pori, conocida por su antiguo festival de jazz y por la obra del arquitecto y diseñador finlandés Alvar Aalto – que también encontramos en Eura (región del lago Pyhahärvi). Y el célebre pueblo de madera de Rauma – Patrimonio Mundial de la UNESCO -. Una propuesta de viaje por Finlandia en verano perfecta para descubrir lo esencial de este pedazo de la costa suroeste y del paisaje del Parque Nacional del Mar de Botnia.
Navegando por el Archipiélago de Oura. Paisajes del Parque Nacional de Botnia
El sol apenas se pone en este temprano verano de días eternos e ilumina las aguas del Báltico a esta hora de la mañana. En el puerto de Krookka está lista la pequeña embarcación que nos llevará a descubrir el Archipiélago de Oura. Nuestra sonriente guía Pippu nos espera tan ilusionada como nosotros, y no es para menos, pues vamos a explorar uno de esos espacios protegidos de la Red Natura 2000, a desembarcar en una isla y quizás avistar águilas marinas o cormoranes. Cargamos la gran cesta llena de productos del Archipiélago y el pescado ahumado de la pescadería Kalaliike Eljas Sanna – uno de los ahumaderos tradicionales de Merikarvia – llena el barco con su aroma intenso.
Siempre es un placer surcar las aguas del Báltico para descubrir los cientos de miles de islas que conforman los Archipiélagos que posee Finlandia. Este verano afortunado exploraremos a fondo el Parque Nacional del mar de Botnia: la isla del faro de Kylmäpihlaja (Rauma), la isla del faro de Isokari (Uusikaupunki) y, ahora, la isla de Ouraluoto. Es un paisaje ya como familiar el del Parque Nacional de Selkämeri.
8 kilómetros separan Merikarvia del Archipiélago de Oura, que para nuestra sorpresa también son un ejemplo de zona costera en la que emerge la tierra del mar unos milímetros cada año. Al igual que las islas del Archipiélago de Kvarken, más al norte, en la zona de Vaasa.
Nuestro diestro piloto navega con cuidado entre las innúmeras islas e islotes rocosos esparcidos por la costa. Menos mal que pertenece a una familia de pilotos. Su abuelo estuvo trabajando en la antigua estación piloto que fue la isla de Ouraluoto en el pasado.
La isla de Ouraluoto, antigua estación piloto en medio del Parque Nacional del Mar de Botnia
Las vistas de la isla de Ouraluoto desde el agua son magníficas: vemos ya el edificio rojo de dos pisos, sede de la estación piloto que estuvo en funcionamiento de 1851 hasta 1968. Desembarcamos en el pequeño muelle de madera y sentimos en seguida esa sensación de paz que experimentamos en muchos lugares de Finlandia. Sólo el sonido del mar, del viento persistente y las aves que están en plena época de nidificación.
Ese sueño de isla remota en la que descansar un tiempo con la que soñamos todos puede hacerse realidad en muchas de las islas de los archipiélagos del Báltico. La isla de Ouraluoto está abierta y acondicionada para que los visitantes puedan pasar allí una jornada o pernoctar. Sus bonitas cabañas de madera pintadas de rojo falun con ventanas azules o blancas son alojamientos. También hay una zona para tiendas de campaña, para hacer fogatas y mesas al aire libre. Y, cómo no, una sauna – ¡estamos en Finlandia! – con muelle para nadar.
La visita de la estación piloto es un momento para ver fotografías antiguas, mapas y escuchar recuerdos. Los pilotos de la isla de Ouraluoto ayudaban a los grandes cargueros a atravesar el accidentado Archipiélago de Oura. Nos ponemos en la piel de estos marinos imaginando sus días en la isla de Ouraluoto y surcando el mar de Botnia, mientras contemplamos las magníficas vistas panorámicas.
Delicias gastronómicas del Archipiélago
Es tiempo de degustar las delicias gastronómicas del archipiélago, así que nos dirigimos a la cabaña (kota) que hay junto al mar siguiendo una larga pasarela de madera. Allí, al calor del fuego y del café salen las confidencias del piloto, historias de mar y de vida.
Las conversaciones versan también sobre gastronomía finlandesa: las salchichas típicas que se ponen en las barbacoas, la mostaza (sinappi) finlandesa, el pescado ahumado en Merikarvia, salmón marinado, ensalada de patata, pan negro del archipiélago. Y de postres: yogures de moras de los pantanos y chocolate de la marca finlandesa Fazer. Delicias que degustamos charlando animadamente, contemplando a ratos el mar desde las ventanas de la cabaña.
La próxima vez esperamos quedarnos en la isla de Ouraluoto a pasar la noche. Ahora nos despedimos siguiendo las pasarelas que cubren la pequeña isla, respirando esta tranquilidad.
Aprendiendo a pescar en el río de Merikarvia – Merikarvianjoki
Pero nuestras aventuras en Merikarvia apenas están comenzando y los días son tan largos en verano en Finlandia, que aún tenemos tiempo para explorar otras aguas tierra adentro: las del río Merijoki, un destino de ensueño para pescadores. Nada menos que 24 kilómetros con 6 kilómetros de rápidos, donde nadan felices truchas arcos iris, salmones, lucios,…
La próspera empresa Eumer abre sus puertas a aquellos que quieran pasar unos días pescando con mosca y con señuelos, que quieran comprar material de pesca, o hacer cursos de pesca para profesionales. Incluso es posible hospedarse en cabañas o en la Villa Eumer, junto al mar. Los hermanos Jaakko y Oli Ojamo fundaron la empresa Eumer en 2007, pero su éxito comenzó cuando, de niños, crearon las moscas de tubo y más tarde las Spintube, galardonadas mundialmente. Así que estamos en buenas manos para nuestro primer curso de pesca fluvial.
Antes paseamos a orillas del río para contemplar este entorno bellísimo de intensas tonalidades de verde. Es buen momento para aprender a hacer una corona de flores para Juhannus, – San Juan, en finlandés -, una de las noches más mágicas del año en Finlandia y en todo del mundo.
Nos esperan ya en el río con las cañas preparadas, así que comienza una serie de lanzamientos de sedal que se extenderá a lo largo de la tarde, entre risas y enganches. Porque, aunque parece fácil, pescar tiene su arte y esperamos terminar el día sabiendo al menos lanzar el sedal a los puntos donde nos aseguran que descansan o se esconden los peces, o donde se dejan llevar por la corriente.
Más que atrapar el pez más grande o más difícil, lo más atractivo de pescar son los gestos de lanzar una y otra vez la caña, esperar sin prisa, las risas cada vez que se nos engancha el señuelo a una rama de un árbol o en el fondo del río. También la emoción del movimiento del sedal cuando un pez pica, y más si es grande, pero sobre todo cuando, con cuidado, se lo deja en libertad.
Unas enseñanzas interesantísimas que retenemos, a la vez que aprendemos una de las lecciones más importantes para ser un buen pescador: la paciencia. Y no es difícil en este paisaje verde, luminoso, mientras nos dejamos acunar por las aguas del río Merikarvia.
Cena a orillas del mar en el camping de Merikarvia. Merrycamping
Atardece en Merikarvia y regresamos al mar para saborear delicias de la gastronomía finlandesa y cervezas artesanas locales en uno de los alojamientos más populares de Merikarvia. El Merricamping, con sus zonas de tiendas, cabañas y playa que tiene nada menos que cuatro estrellas.
Dormir en Merikarvia- Apartamento con sauna mirando al mar- Villa Eumer
Un gran apartamento con vistas al mar nos espera para pasar la noche en Merikarvia, ideal para grupos de pescadores, familias y amigos, con varias habitaciones y una gran sala común. Y lo mejor, esos grandes ventanales que nos hacen sentir como si estuviéramos en el medio del mar. Y la sauna, claro, la sauna finandesa siempre presente para satisfacción del viajero. Es un placer relajarse en el jacuzzi exterior mirando cómo atardecer en Merikarvia. Los tonos rojos y amarillos comienzan a teñir las aguas oscuras, al sol le cuesta irse a mediados de junio en Finlandia.
Paddle surf en el puerto de visitantes de Krooka
Disfrutamos de una mañana apacible en el puerto de Krooka, subiéndonos nuestras tablas de paddle sur y remando en la bahía de Merikarvia. La imagen de ayer en el barco se superpone con esta, las vistas desde mar adentro son las mismas: el bonito edificio del gastropub Merri Monk, la terraza de la cafetería Krookan Plassi – donde se pueden alquilar tablas de paddel sur y esquís para deslizarse por el mar helado en invierno -, la pescadería Eljas Santa Ky y otro bonito edificio: la Galería Vanha Savu.
Nos deslizamos fácilmente en nuestra tabla de paddle sur por el tranquilo Báltico, curioseando desde la orilla los pequeños embarcaderos de madera de colores, las casas privilegiadas que miran al mar.
La Galería Vanha Savu, antiguo ahumadero de pescado
Tras el ejercicio, toca la visita de uno de los sitios más emblemáticos de Merikarvia: la Galería Vanha Savu. Un centro cultural que es galería de arte y espacio de representaciones teatrales. Actualmente hay una exposición de fotografías de faros finlandeses, algunos de los cuales reconocemos pues tuvimos la suerte de visitarlos.
Pero lo mejor de la Galería Vanha Savu es que el edificio era un ahumadero de pescado, el más grande del puerto de Krookka que se utilizó entre 1950 y 1964. El espacio de la galería principal albergaba originalmente grandes estanques donde se limpiaba, salaba y ensartaba el pescado antes de ahumarlo. En la parte de abajo estaban los hornos de carbón. Todavía puede sentirse ese aroma a humo caracterísitico en este espacio reconvertido en galería de arte y utilizado también como sede de la Oficina de Turismo de Merikarvia.
Visita a la Granja Koivuniemen Herra
Termina nuestra visita a Merikarvia en un lugar de lo más original e inesperado: la Granja Koivuniemen Herra. Se trata de uno de los destinos de agroturismo más populares de la zona, donde pasamos un día de lo más divertido convirtiéndonos en granjeros por unas horas.
El lugar es sensacional: un gran espacio con la casa principal, varios establos y amplias zonas de pasto rodeadas por un bosque. Sin más espera, comienza nuestra aventura en MuuMaaland. Primera parada junto a una vaca bien alimentada y preparada para que la ordeñemos. A continuación visitaremos otros animales de la granja, y jugaremos a montar caballos de juguete, a saltar vallas y a disfrazarnos de granjeros. Oimos la llamada para subir al tractor que nos paseará por los dominios de la granja.
Terminamos montando caballos de verdad y comiendo un rico menú en el restaurante familiar de la Granja Herra MuuMaa. No está nada mal convertirse en un niño por unas horas, la diversión está asegurada.
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Es hora de despedirse de Merikarvia y de nuestra compañera de aventuras, no sin pena, con la sensación de haber disfrutado enormemente de este rincón de la costa occidental de Finlandia. Explorar el Archipiélago de Oura, disfrutar de las aguas del Báltico y de las del río Merikarvianjoki, ha reafirmado una vez más la idea que tenemos de la rica y protegida naturaleza que posee Finlandia.
Cómo llegar a Merikarvia
Merikarvia está a tan sólo 51,8 km al norte de la ciudad de Pori, a la que se llega en coche por la autovía E8 que recorre la costa occidental de Finlandia. Para llegar al centro hay que desviarse por la carretera 270 que viene de Siikainen y recorrer 8,5 km en dirección oeste.
Desde Turku son 2 horas 25 en coche por la carretera 204. También hay buses tanto desde Turku como desde Pori.
Artículo escrito por María Calvo Santos.
Agradecimientos
¡Gracias a Merikarvian kunta, a Noora-Mari por hacernos un programa sumamente interesante! Y, por supuesto, a nuestra maravillosa guía Siini-Maaria, Pippu, que llenó nuestros días de sonrisas y nos contó mil historias de Merikarvia hasta conseguir que nos enamorásemos del pueblo.
