Turismo por la alegre Colonia, el orgullo Kölsch

Colonia se muestra acogedora desde el primer momento que tomamos contacto durante nuestro viaje por la región de Westfalia Renania del Norte, en el oeste de Alemania.

Su estilo de vida alegre es contagioso, y uno se mimetiza desde los primeros pasos nada más salir de la estación de tren. Aunque es la cuarta ciudad más grande de Alemania, su ritmo se parece al de una pequeña torre de Babel donde predomina la mezcla y la gente o bien se conoce o bien es cercana.

Puente Hohenzollern en Colonia
Puente Hohenzollern en Colonia

Quizá sea porque que los romanos fundaron aquí uno de los castrum más importantes de Alemania, sembrando un carácter Mediterráneo en el centro de Europa. Emigrantes de los países del este, de Turquía y una importante colonia de españoles han ayudado a formar un crisol tolerante donde lo importante son los ciudadanos, y no su origen.

Al mismo tiempo hay un sentimiento de orgullo, que lejos de ser excluyente se nutre de la aportación de cualquier comunidad o gente llegada desde fuera. En pocos lugares hemos percibido la tolerancia hacia lo extranjero. Lo relevante es participar en ese sentimiento Kölsch.

El universo Kölsch abarca un amplio espectro de la cultura, o la música, con numerosos grupos que cantan en el dialecto local, y cuyas canciones parecen himnos cuando la gente se suma en coro a cantarlas con una buena cerveza -por supuesto Kölsch- en la mano.

Rhin abajo y arriba los barcos que transportan mercancía se van sucediendo. Como si todo tuviese un significado preciso sus nombres son premonitorios. El Rubicón va hacia el sur, recordando el paso que dio Julio Cesar al cruzar el río Rubicón, frontera entre el territorio de Roma y la provincia de Galia Cisalpina, rompiendo el acuerdo entre generales romanos. Alea jacta est!! exclamó y nosotros tras sus pasos cruzamos esta vez el Rhin por el puente Hohenzollern,  viendo como se aleja el barco con nombre romano, mientras en dirección contraria se acerca el Somnium Vitae -«La vida como sueño»-.

El famoso carnaval de Colonia

Los habitantes de Colonia viven tanto su carnaval que incluso se sorprenden de que en España también se celebre. Nosotros les hablamos del Carnaval de Tenerife o de los de Cádiz, pero su desconocimiento es igual al que nosotros teníamos antes de venir y sorprendernos con el despliegue del Carnaval de Colonia.

El Carnaval es tan madrugador que el 11 de noviembre (mes 11), a las 11:11h. comienza con un pistoletazo de salida para abrir boca ante los eventos de febrero.

Nosotros hemos querido visitarla aprovechando su fiesta más importante, el Carnaval (Fastelovend o Fasteleer en dialecto), que nos dicen que transforma Colonia en una fiesta ciudadana. La semana de Carnaval es una auténtica locura, Colonia se para literalmente para celebrarlo, y no solo participan los jóvenes o los más trasnochadores, si no que toda la ciudad se empapa y se suma. Ir sin disfraz es casi un delito, y en los desfiles lo mismo hay niños que gente mayor que animados por un corazón carnavalero les hace mover el cuerpo.

En las calles el ambiente es especial, y la gente es amable en cuanto nos veía «desenfundar» nuestras cámaras de fotos. Aunque, ojo, es importante saber que en el desfile es más que probable que seamos fruto de los lanzamientos de caramelos de los participantes, o de los «francotiradores» que van sobre las carrozas.

Desfile del carnaval de Colonia
Desfile del carnaval Rosenmontag de Colonia

El desfile de carrozas del  Rose Monday (Rosenmontag, es decir lunes de excesos) -el punto álgido del carnaval-, es un espectáculo, con más de 160 grupos y asociaciones que recorren la ciudad en un acontecimiento que dura todo el día. Los niños gritan «Kamellen», agitando sus bolsas que funcionan como cestas para cazar al vuelo las más de 300 toneladas de dulces que se lanzan desde las carrozas.

Nosotros por supuesto participamos con nuestros disfraces, Frida Kalho y un gángster se suman al jolgorio del Carnaval y disfrutamos de unas vistas inmejorables desde el edificio de la Oficina de Turismo, viendo pasar más de cien carrozas con sus grupos musicales, piruetas acrobáticas, y mucha sorna e ironía en las carrozas alegóricas.

Qué ver en Colonia – Ruta por la Ciudad

Colonia es realmente una ciudad agradable para conocer a pié, muy bien comunicada con transporte público gracias al metro, autobuses y tranvía, y que se asoma a las orillas del río Rin para dar un paseo relajado. Sobre el mismo Rhin, los cruceros fluviales en verano son un atractivo modo de ver Colonia, pero no el único, porque el teleférico que cruza el río proporciona una de las mejores fotografías de la ciudad renana.

Roma late a pocos metros bajo el suelo del casco histórico de Colonia, el Altstadt. El Römisch – Germanisches Museum es el lugar perfecto para conocer la romanización de la ciudad, y que junto a los restos del Palacio del Gobernador romano, el Praetorium, la torre Römmerturm, y tramo perfectamente conservado del alcantarillado romano, permiten profundizar en la historia de un territorio en el límite del Imperio, siempre expuesto a las tribus germánicas.

Catedral de Colonia – Kólner Dom

Como si de un ascensor se tratase nuestra mirada se eleva hacia el cielo intentando acaparar la impresionante verticalidad de la catedral de Colonia.

En 1248, el mismo año en que los reinos ibéricos recuperaban Sevilla, se iniciaron las obras de la catedral gótica, tan ambiciosas que a principios del siglo XVI, casi trecientos años después de comenzarse, pararon las obras por la falta de recursos. Solo con el auge del romanticismo alemán del XIX se lleva a cabo un último impulso para finalizarla en 1880. Las dos torres de la fachada alcanzan los 157 metros de altura, y su nave central es la más larga de Alemania. No es de extrañar que Unesco la declarase en 1996 Patrimonio de la Humanidad.

Durante la segunda guerra mundial la estructura  logró resistir en su mayor parte, y con el armisticio se reconstruyó para que recuperase su magníficas formas.

La majestuosidad de la catedral de Colonia nos deja perplejos
La majestuosidad de la catedral de Colonia nos deja perplejos

Iglesia Gross St.Martin

Junto a la catedral la figura de la Iglesia Gross St.Martin se distingue fácilmente desde muchos lugares de Colonia. Su planta cuadrada y el tejado piramidal la hacen inconfundible. Desde la plaza Fischmarkt (el antiguo emplazamiento del mercado de pescado) sus formas románicas completan la postal de las casas -antiguos almacenes- de colores a sus pies. En las callejuelas el ambiente es asombrosa, cervecerías y pubs atraen a la gente llenando las calles empedradas.

Casitas de colores en Colonia
Casitas de colores en Colonia

Koelntriangle

El mirador del edificio Koelntriangle es sin duda el mejor modo de ver Colonia desde las alturas, con una panorámica excelente de la catedral, de la iglesia Gross St.Martin o el puente Hohenzollern sobre el río Rhin. Si hemos tenido la oportunidad de ver el estado de Colonia tras los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, en ruinas, podremos comparar y agradecer como resurgió de las cenizas hasta convertirse en una de las ciudades más bellas de Alemania.

Mirador KölnTriangle en Colonia
Vistas desde el mirador KölnTriangle en Colonia

NS-Dokumentationszentrum der Stadt Köln (National Socialism Documentation Center)

La visita a la antiguo centro de detención y tortura de la Gestapo en Colonia, conocido como «EL-DE Haus,» (por las iniciales del propietario, el empresario Leopold Dahmen) era para nosotros imprescindible. En este edificio la Gestapo recluyó, torturó y asesinó a decenas de «elementos sospechosos». Hoy en día está convertido en museo del Nacionalsocialismo.

El recorrido muestra la cronología del germen nazi en el periodo entre-guerras y como se desarrolló en Colonia en los años treinta hasta la llegada de Hitler y la segunda guerra Mundial. En el sótano conocimos las desgarradora vivencias de los prisioneros, cuyo testimonio aún está grabado en las paredes.

Shokoladenmuseum – Museo del Chocolate

El Museo de Chocolate de Colonia nos transporta desde tierras mesoamericanas a lo largo de la historia de la planta de cacao y la transformación en chocolate. Interactivo y extremadamente visual y goloso para los niños, permite ver in situ el proceso de elaboración, y diseñar nuestra propia tableta de chocolate. Nosotros mismos nos quedamos embobados frente a la fuente infinita de chocolate, relamiéndonos los labios.

El poderoso elixir marrón que hipnotiza a chicos y grandes
El poderoso elixir marrón emanando hipnotizando a chicos y grandes en el museo de chocolate de Colonia

Puente Hohenzollern 

El puente Hohenzollern  une las dos orillas del Rhin, y sirve de pasarela para que los trenes crucen el río hasta la estación Hauptbahnhof. Aunque no aguantó la detonación de las tropas alemanas durante su retirada durante la segunda guerra mundial, hoy se muestra robusto pese a los miles y miles de candados que como lapas se incrustan en la «piel» de hierro del puente. En el extremo este del puente la figura a caballo del emperador Guillermo II hace de anfitrión invitándonos a llegar a Colonia.

Con la majestuosa catedral de Colonia a nuestras espaldas
Con la majestuosa catedral de Colonia a nuestras espaldas

Museos de Colonia

Son tantos y tan interesantes que obligan a elegir o a volver a Colonia de vacaciones. El Museo Kolumba contiene piezas de arte sacro del arzobispado de Köln, mientras que el Museum Ludwig muestra una gran colección de Pop Art estadounidense, de la vanguardia rusa de principios del siglo XX, y es el tercer museo con más obras de Pablo Picasso.

No tuvimos tiempo para dedicar al Wallraf-Richartz Museum (con geniales obras de Rembrandt o Rubens), el museo de la ciudad Kölnisches Stadmuseum; el museo deporte y las Olimpiadas (junto al Museo del Chocolate); o especialmente el de la gran artista multidisciplinar Kathe Kollwitz, nacida en Königsberg.

Eau de Cologne

Si alguna vez te has preguntado de donde proviene el nombre de la colonia, aquí se encuentran muchas de las respuestas. El italiano Giovanni Maria Farina creó en 1709 en su ciudad adoptiva, un agua perfumada a base de esencias naranja, limón, mandarina, lima, cedro, pomelo y bermagota. La Casa de la familia Farina es hoy la sede del Museo del Perfume, y presume de ser la fábrica de perfume más antigua del mundo.

Duthaus 4711
Edificio Duthaus 4711 en Colonia

Un siglo después otra fábrica de agua de colonia, abrió en la calle Glockengasse (no lejos de la Casa Farina), y fruto de la numeración que dieron las tropas francesas (que en 1794 dominaban Colonia), quedó para la posteridad como Duthaus 4711. Cada día a las horas en punto, de nueve de la mañana a siete de la tarde, el carrillón de la perfumería suena con el poderoso himno de la Marsellesa y la canción Der treue Husar, muy famosa en los carnavales de Colonia.

 «Kölsch», la cerveza de Colonia

Sumidos en pleno Carnaval nos acercamos a una de las cervecerías famosas de la ciudad, llamada Brauerei zur Malzmühle para mezclarnos con los locales y brindar con el «Drink doch ene mit» , algo como «¡Ven y únete a nosotros para tomar una copa!».

Detrás de los disfraces puede estar un director de un banco, sentado al lado de un cajero de supermercado, arrimado sus jarras para brindar, y haciendo que al menos por un día las clases sociales no existan.

La cerveza Kölsch es una de las pocas que tiene denominación de origen, y por tanto solo se puede fabricar aquí. Se caracteriza por su alta fermentación, bastante lupulada, y con una graduación alcohólica más alta que por ejemplo las Lager. Se sirve en un vaso estrecho, característico de Colonia, llamado Stangen.

Hay que estar atento ya que a menos que pongamos el posavasos sobre la cerveza acabada, el camarero – Köbes (una derivación del nombre Jakob,- nos la sustituirá por una llena sin avisar. Damos fe de ello….

Probando la cerveza kölsch
Probando la cerveza kölsch, símbolo de Colonia

Los Köbes son casi una reliquia de los viejos oficios. Antiguos maestros cerveceros vestidos con su camisa azul y doble hilera de botones negros, dicen que tenían un carácter huraño y algo fuerte, especialmente cuando tenían que ponerse a servir cervezas, algo para ellos tedioso, ya que preferían fabricar y no servir. Hoy en día conservan algo de esa «mala leche», y suelen ser bastante bromistas y cínicos. No paran de moverse y siempre llevan una bandeja (Kranz) circular que les sirve como un revolver para meter «munición» cervecera.

Pero no todo es cerveza, y los contundentes platos que se ofrecen van desde el Halver Hahn (pan de centeno, cebolla, mostaz ay queso gouda), el caviar de Colonia (que en realidad es morcilla con cebolla), el Hämche (codillo) o  el Röggelche met Kies und e Glas Wieß.

Como decíamos, ver el Carnaval de Colonia brinda una oportunidad única de mezclarse con sus gentes -y con otros tantos llegados de cualquier rincón del mundo-, pero al mismo tiempo hay que advertir que prácticamente todos los museos están cerrados, por lo que o bien llegamos unos días antes, o volvemos unos días después como en nuestro caso, después de acercarnos a conocer Düsseldorf.

Köln Card

La tarjeta turística de Colonia es una ventaja para los que suelen usar a menudo el transporte público, especialmente si tenemos pensado movernos a otras partes de la ciudad. Es cierto que en el centro las distancias no son muy grandes, pero con el tiempo apretado siempre viene bien agarrar un tranvía o el metro para desplazarnos con agilidad.

Cómo llegar a Colonia

El aeropuerto de Köln/ Bonn (CGN) es la mejor opción para volar desde España. Cuenta con estación de tren que conecta las terminales con el centro de Köln  (estación de tren – Hauptbahnhof en alemán- Köln). La estación de tren es tan céntrica que nada más salir se alza la catedral delante de nuestros ojos.

Agradecimientos

La labor de la oficina de turismo de Colonia Visit Köln es sin duda meritoria y por eso queremos agradecer su ayuda en la preparación de nuestro viaje, especialmente Nadja Brahm, Claudia Neumann and Judith Blümcke. También al HOSTEL KÖLN GmbH en la calle Marsilstein 29 que nos ofreció su alojamiento y un ambiente muy propicio para disfrutar de su Carnaval.

Con las responsables de la oficina de turismo de Colonia durante el carnaval
Con las responsables de la oficina de turismo de Colonia durante el carnaval

Oficina de turismo en Colonia

La oficina de turismo está junto a la catedral de Colonia, en la calle  Kardinal-Höffner-Platz 1 50667 Köln. Allí proporcionan mapas, folletos en español y toda la información para conocer Colonia, además de vender la tarjeta Köln Card.

2 comentarios de “Turismo por la alegre Colonia, el orgullo Kölsch

    1. El Giróscopo Viajero

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      Reply

      Gracias Mari Carmen. Colonia y el resto del oeste de Alemania son muy interesantes para plantearse un viaje. Te lo recomendamos.

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