El turismo evoluciona a pasos agigantados, con una rapidez que obliga a adaptarse e incluso anticiparse. El desembarco de conceptos como el turismo sostenible, o el de viajes temáticos han generado un turismo vertical con adeptos especializados. El turista cada vez es más exigente y además de la oferta de ocio de los monumentos, museos y atracciones, busca rellenar las horas de sus vacaciones al máximo.
Un ejemplo claro es el de los corredores de maratones que siguen el calendario anual para «correr» detrás de la agenda running, o el de los amantes de la cerveza que prácticamente diseñan sus viajes en función de la calidad, variedad y aparición de productores de cerveza artesana.
Uno de esos nichos que ha vivido un crecimiento espectacular es el del fenómeno Escape Room, una terminología que hace unos años nos hubiese obligado a buscar en Google pensando que podía estar relacionado con el escapismo de Houdini, y que hoy en día es una actividad de ocio plenamente asentada en cualquier rincón de Europa.
Pero…qué es el Escape Room ?
Para los neófitos el Escape Room viene a ser un juego o actividad de ingenio que suele durar 60 minutos y que consiste en solventar una serie de acertijos y pruebas para conseguir «escapar» de una serie de habitaciones donde se desarrolla un juego temático. Muchas de esas ambientaciones tienen que ver con la ciencia ficción, el terror, con asesinos, zombies o carceleros y los escenarios son casas encantadas, prisiones, laboratorios, naves espaciales, maquinas del tiempo entre otros.
Al más puro estilo de McGyver hay que conjugar ingenio y habilidad para descifrar acertijos, encontrar pistas o conseguir atinar en pruebas que requieren más maña que fuerza. Es vital trabajar en equipo, coordinados y repartiendo tareas, con una persona orquestando la búsqueda para evitar muchos capitanes y pocos marineros. Los grupos suelen formarse con 2-6 personas y existen salas gemelas donde se puede competir al mismo tiempo con otros grupos para ver quién es más audaz a la hora de escaparse.
La recreación es importante, logrando que nos metamos de lleno en la aventura, pero más allá de lo estético, lo que valoran los jugadores es el desarrollo, la lógica y dificultad, y la originalidad a la hora de crear una trama que nos mete de lleno en la historia.
Series como The Big Bang Theory con sus personajes «cerebritos» han contribuido a difundir las Escape Rooms, que lejos de inventar nada -ya que el fenómeno del suspense lo tenemos ya presente en la literatura desde hace siglos- han trasladado el escenario para hacernos partícipe y vivir en primera persona la acción.
Los «conversos» a esta dinámica eligen a menudo su destino de vacaciones en función de recomendaciones u opiniones de las salas de escapa de ciudades concretas. Esto ha servido para que algunas capitales europeas se hayan posicionado como polos de atracción de este target viajero. Obvia decir que para ello se debe tener un conocimiento de la lengua de ese país, aunque es cada vez más frecuente que existan Escapes Rooms en inglés, como idioma más hablado.
China es el país donde el fenómeno de las Escape Room genera más esquizofrenia colectiva, con un número de salas por persona que casi es equivalente al de su gigantesca población. Pero otros ciudades como Moscú, Londres o Tokio no le van a la zaga. Curiosamente la capital de Hungría, Budapest que abrió la primera sala conocida en 2011 (Parapark, con el permiso de los japoneses que defienden su invención ), organiza mundiales de Escape Room y se ha posicionado como destino internacional.
En apenas unos años esta moda se ha difundido como un tsunami por todo el mundo, creando una economía local que ha impulsado el turismo y el ocio, sin necesidad de una gran inversión, y abriendo una brecha en las opciones de experiencias de diversión.
Escape Rooms en España
España es uno de los países donde ha tenido más aceptación y casi cualquier población cuenta ya con al menos una sala. Barcelona y Madrid se han consolidado como destinos con más opciones, pero ciudades como Bilbao, Valencia o Sevilla no le van a la zaga. Además la competencia no es tal ya que el fenómeno es tan transversal y tan adictivo que una vez que se ha probado, es muy probable que probemos otras salas de escape Room en la misma ciudad, lo que permite una colaboración entre el sector. Es más, muchas salas te animan con información y flyers a que conozcas otras experiencias de otras ciudades, mediante un consorcio que hermana unas salas con otras.
Nuestras experiencias como escapistas:
Escape Time -Área Restringida y Destino Orión- (Castro Urdiales), Clue Hunter (Madrid), Mad Mansion (Bilbao) Chicken Banana -Prisión-(Barcelona), Escape Collage -La habitación de Nanako- (Madrid), Horror Box -Ouija y Jigsaw- (Barcelona), Coco Room -Ámbar La Visita- (Madrid).
