De Carnaval en Ptuj (Eslovenia) con los Kurent

Eslovenia es un país al que volvemos con frecuencia, y en el que independientemente de la época del año encontramos lugares desconocidos para visitar. En esta ocasión hemos llevado a cabo un viaje etnográfico para conocer algunos de sus carnavales más famosos, haciendo parada en Ptuj, al este de Eslovenia.

El Castillo de Ptuj en el punto más alto de la ciudad ©Marcela Pérez Z.
El Castillo de Ptuj en el punto más alto de la ciudad ©Marcela Pérez Z.

Ptuj es además de uno de los lugares más fotogénicos de Eslovenia, con su castillo vigía sobre la colina, la ciudad más antigua de Eslovenia, fundada por los romanos en el año 69 d.C. como  Colonia Ulpia Traiana Poetovio. Su importancia en la época fue tal que  Vespasiano fue apoyado como emperador por las tropas Legio XIII Gemina, que tenían en el castro romano de Poetovio su zona de control del territorio.

KURENTOVANJE – CARNAVAL DE PTUJ

Como en muchos otros rincones de Europa las tradiciones pre-cristianas estaban ligadas a los ciclos estacionales de cultivo. El fin del invierno indicaba el periodo de siembra tras el frío invierno. La asimilación del cristianismo y la Iglesia fue reconvertir esos ritos en festividades religiosas, enmascarando a menudo la parte más salvaje y pagana de esas tradiciones.

Los Kurent

Los Kurent o Korant son el personaje más conocido de los carnavales (en esloveno Pust) del este de Eslovenia, pero no los únicos. Cubiertos de las pieles de oveja, con cencerros en la cintura y coloridas máscaras cubriendo el rostro, los kurents desfilan en una danza frenética y ruidosa por las calles. Hay dos tipos de kurent: los markovci, que llevan plumas de pavo y cintas de papel coloridas y son típicos de las aldeas de Ptuj; y los haloze, con cuernos que son característicos de los campo alrededor del río Drava.

La palabra kurent proviene de korvh/kouvrh: muchacha, una derivación eslovena de kurva, prostituta. El origen de la festividad tiene raíces desconocidas con variadas hipótesis que los adscriben a los rituales ilirios y celtas, o bien a la adoración de la diosa Cibeles por los romanos de Poetovio (la antigua Ptuj) o incluso asociados a los Uskoks (soldados croatas de los Habsburgo) en el siglo XVI.

Kurents en pleno ritual durante el Carnaval de Ptuj ©Marcela Pérez Z.
Kurents en pleno ritual durante el Carnaval de Ptuj ©Marcela Pérez Z.

El primer testimonio visible que se tiene es a partir de las fotografías de principios del siglo XX, que muestran a los Kurent con pieles de oveja o conejo, pero sin las máscaras que observamos hoy en día. Estas figuraciones en los rostros fueron añadidas posteriormente para darle más colorido y por qué no decirlo…miedo. La máscara es de cuero o madera con orificios para los ojos y la boca, debajo llevan un mostacho confeccionado con espigas de maíz, una larga lengua roja, y los dientes están hechos de alubias blancas, enhebrados en una cuerda. En las piernas llevan polainas de punto rojas o verdes. El traje de Kurents se llama «kurentija» y es típico de las zonas rurales de Ptujsko, Dravsko polje y Haloze

La tradición fijaba en su origen que solo los hombres solteros podían portar el traje, y se les permitía cortejar a las mujeres solteras encerrándolas entre sus brazos y el garrote (ježevka) con pinchos de castaña que portan. En la base del palo los kurent atan los pañuelos bordados por las chicas que cortejan. Hoy en día hay un debate entre puristas que solo quieren hombres en el desfile, frente a los grupos que han abierto la tradición a mujeres y niños.

Aitor posando con unos pequeños kurent ©Marcela Pérez Z.
Aitor posando con unos pequeños kurent ©Marcela Pérez Z.

Los Kurent son los encargados se asustar al invierno y permitir la llegada de la primavera. Estos escandalosos diablos peregrinaban casa por casa en los pueblos para proporcionar buena suerte con las cosechas. Los kurent forman un círculo en el patio y saltan alrededor de los propietarios, espantando con el ruido de sus cencerros y sus amenazantes varas los malos espíritus y al diablo -elemento que la iglesia se encargó de añadir al elenco de malignos-.

A cambio los dueños de la casa les daban viandas que por su cantidad y calidad medían el grado de bonanza de la recolección. Este peregrinaje puerta a puerta se llevaba a cabo desde la fiesta de la Candelaria (2 de febrero) hasta el Miércoles de Ceniza.

Jugando con un kurent... Si no dan tanto miedo al final ©Marcela Pérez Z.
Jugando con un kurent… Si no dan tanto miedo al final ©Aitor Pedrueza

Para hacer más accesible a la gente de Ptuj y al turismo esloveno -inicialmente, y más tarde internacional- se trasladaron las celebraciones al centro histórico de la ciudad. Hace años se les prohibía entrar disfrazados porque algunos metidos en demasía en el papel carnavalero bebían hasta perder el sentido y era frecuente que acabasen a golpes, o incluso con algún muerto de por medio. Hoy los tiempos son más pacíficos y más allá de la broma o la picardía, el carnaval de Ptuj se vive con alegría en medio de festejos que duran varios días.

El primer testimonio escrito del carnaval de los Kurent como tal es de 1959, y en 2017 Unesco incluyó la procesión puerta a puerta de los Kurent en su lista de Patrimonio de la Humanidad, en calidad de Patrimonio Intangible.

Disfrutando de los carnavales

Tras nuestra reunión con los responsables del turismo de Ptuj seguimos el desfile de disfraces y máscaras que van calle abajo hacia el ayuntamiento, donde se iban presentando a los grupos, algunos llegados de Italia, Gales o Francia.

De repente, cuando ya parecía que los protagonistas del carnaval de Ptuj no iban a acudir, los ruidosos kurent hacen acto de presencia, ensordeciendo el ambiente y causando estupor entre los asistentes.  Nuestras cámaras tratan de enfocar a los frenéticos kurent que no paran de moverse y cuando menos lo esperamos han «atrapado» a nuestra fotógrafa Marcela y saltando alrededor de ella la invitan a sumarse a la fiesta. Son minutos de locura, con los Kurents meneando sus cencerros, pasando calor en esta edición en la que la nieve y el frío no han visitado Eslovenia. Alguno que otro está a punto de precipitarse al suelo, quién sabe si por la escasa visión que dejan los orificios de la máscara, o por los tragos extra de vino y aguardiente para aguantar el peso del traje de los Kurent.

Tal como aparecen se agrupan como ovejas, comandados por el personaje del diablo que destaca entre las pieles con su intenso traje rojo. El centro de Ptuj se queda de nuevo en silencio, contando los días para que los Kurent vuelvan el año que viene.

Los Kurent se van hasta el carnaval del año próximo
Los Kurent se van hasta el carnaval del año próximo ©Aitor Pedrueza

Muchas gracias al TIC (Oficina de Turismo de Ptuj), y en especial a Katja Ertl y a Aljoša Ciglar.

Cómo llegar a Ptuj

Ptuj está conectado con transporte público desde Maribor y Liubliana, con autobuses que permiten llegar sin problemas.

Dónde Comer ?

Uno de los mejores restaurantes de Ptuj es el Amadeus (Prešernova ukica 36), donde puedes probar las especialidades de platos eslovenos, perfectos para cargarte de energía.

Oficina de turismo de Ptuj

En el castillo de Ptuj hay una exposición permanente sobre los carnavales de Ptuj, con los vestidos típicos de cada uno de los personajes de los carnavales eslovenos de los pueblos en torno a Ptuj. De eta manera si no tenemos la suerte de venir en época de carnavales, podemos al menos conocer más sobre la tradición y ver sus trajes típicos expuestos.

Si queremos más información sobre qué ver y hacer en Ptuj o sobre el carnaval de los Kurent podemos visitar la oficina de Turismo (TIC) en la calle Slovenski trg 5, debajo del castillo, y frente al teatro.

2 comentarios de “De Carnaval en Ptuj (Eslovenia) con los Kurent

    1. El Giróscopo Viajero

      - Edit

      Reply

      Hola Emilio! Lo es, acabamos de volver de ver el carnaval de Ptuj en Eslovenia y otros en diferentes pueblos. si te interesa para el año que viene y te recomendamos una agencia que prepara viajes a Eslovenia, Croacia, Bosnia, Serbia y el resto de los Balcanes. Saludos

Escribe un comentario!! (Vamos...es gratis y nos hace ilusión saber que te ha parecido.