Quizás una de las islas menos conocidas de Mediterráneo, Córcega es de las más salvajes, de las menos explotadas, por lo que conserva su belleza natural casi intacta. De hecho, muchas de sus riquezas naturales han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Los griegos la calificaron Kallisté, «la sublime», mientras que en Francia la conocen como Ile de Beauté, «Isla de la Belleza», y viendo el fantástico mosaico de paisajes de la isla, podemos comprenderlo.
Se dice que es una montaña en el mar, con cumbres de hasta 2000 metros de altitud y más de 1000 km de litoral, con playas de aguas azul turquesa y arena fina. Profundos acantilados, bosques, lagos de altitud, ríos, viñedos…una riqueza natural que se ha intentado preservar convirtiendo dos tercios de la isla en Parque Natural Regional, con reservas naturales y un Parque Marino Internacional.
Un destino ideal para hacer turismo de naturaleza, ya que ofrece un amplio abanico de actividades: senderismo, escalada, surf, submarinismo, esquí…O para los que buscan simplemente disfrutar de playas paradisíacas y de un clima mediterráneo con temperaturas excelentes. También para hacer turismo cultural, ya que Córcega posee un rico patrimonio, hermosas ciudades y pueblos llenos de huellas y testimonios de su historia. O simplemente un turismo gastronómico y vitícola…Múltiples posibilidades de vacaciones en una isla que se encuentra a un paso de la Costa Azul y de Cerdeña.
Guía de la isla de Córcega (Francia – Europa)